Pulido del metal
Luego del fresado, el aplanado, el torneado y otros procesos, las marcas del mecanizado quedarán en mayor o menor medida en la pieza de trabajo, perjudicando la apariencia y el resultado de uso, es por eso que necesita del proceso de pulido.
Entre los métodos más comunes de pulido se incluyen: el pulido químico, el pulido ultrasónico y el pulido abrasivo.
Durante el pulido químico, la pieza de trabajo se empapa en el medio químico y se disuelve en primer lugar la superficie convexa. Este tipo de pulido no necesita máquinas complejas pero la calidad de este no se puede controlar fácilmente.
El pulido ultrasónico puede hacer que la pieza de trabajo mantenga su forma, pero el equipo es muy costoso y difícil de instalar.
El pulido abrasivo combina la pieza de trabajo con el medio abrasivo logrando una alta eficiencia y calidad. Este pulido se puede utilizar en piezas de trabajo de distintas formas.
Kafan cuenta con más de una década de experiencia en pulidoras por lo que le puede recomendar el mejor equipo de pulido acorde a sus requerimientos. Si usted tiene alguna consulta no dude en comunicarse con nosotros.
El pulido por abrasivos es importante también para el tratamiento de superficies. Antes del pulido, es necesario conocer si este medio de acabado es apropiado para la pieza de trabajo. Por ejemplo, las bolas de acero inoxidable, la porcelana de alta frecuencia y la alúmina fundida marrón son perfectos medios de acabado, pero trabajan de formas completamente distintas. Un medio de acabado inapropiado puede influir en el resultado del acabado, incluso puede dañar la superficie de la pieza. Para más información lo invitamos a que se comunique con nosotros.
